El año 80, con sólo 300 personas -cerca de 12 colles-, nacía un Aplec improvisado, informal y carente de infraestructura que, ya en su segunda edición, incorporaba un pasacalle por las calles de la ciudad de Lleida y presentaba una cierta organización.

El nacimiento del Aplec del Caracol se debe a tres ideas: la propuesta de José Luis González, concejal de UCD, de hacer una caracolada popular el choperal de Cappont, la organización de un concurso gastronómico que el Ayuntamiento de Lleida encargó al hostelero Antonio Costa Sumell, y la notificación al Ayuntamiento de Lleida, por parte de Manolo Calpe, de la intención de hacer una comida colectiva a orillas del río Segre.

Finalmente, la idea de Manolo Calpe, que antes había sido desautorizada por el gobernador civil de la época, vio la luz en 1980 con la creación de la primera pandilla del Aplec: la Orden del Tornillo.